Ahora que ya ha llegado la ansiada primavera de el corte inglés y se aproxima veloz la semana santa, la gente empieza a desperezarse y a prepararse,... los peregrinos veteranos con la mochila fuera del armario y los nuevos preguntándolo todo, ...algunos parecen querer saberlo todo antes de empezar,... y yo pensando que el mundo está al revés. O el mundo pensando que yo estoy al revés,... que no es lo mismo pero es igual.
Y es que aunque tampoco soy un zorro del Camino, algo sé de él,... no demasiado ciertamente, pero algo, algo,... algo si que si. Y contradictoriamente quiero saber menos,... quiero que me pase como con otras cosas que he conocido, como por ejemplo el fondo del mar,... me gustaría olvidarme para volver a tener la misma sensación que cuando me sumergí a bucear por primera vez,.. después lo hice en multitud de ocasiones, pero ninguna fue como cuando lo descubrí,... o como con "El señor de los anillos", del que me encuentro asqueado después de tanto bombo, película y parafernalia comercial,... me molaría tener un lapsus si lo fuese a leer mañana y pegarme la flipada total que hizo que quisiera transportarme y quedarme a vivir en Hobitton para siempre.
Por poner dos ejemplos, no demasiado transcendentales, así a boleo...
Pues lo mismo para el Camino, que la próxima vez que lo haga quiero,... no saber como es el inicio en Roncesvalles, ni la subida al Perdón, ni que se pasa por Santo Domingo,... ni la diferencia entre un albergue parroquial y uno privado,... ni como se te aparece Hontanas por arte de magia,... ni que el Vitorino es un geta y aparece en la guías como elemento famosillo peculiar,.... ni que en Villa Tempujo no hay que parar por que el hospitalero es un sargento además de gabacho,...ni que todo se ha convertido en un negocio jacobeo donde el peregrino es el culpable, la víctima y el protagonista principal,... ni que en verano hay masificación,... ni que es un turigrino, un bicigrino y un charlotero,... ni que en la cruz de hierro hay que echar un canto rodado,... ni poseer la tranquilidad de la experiencia,...., ni que existe el foro amarillo,... ni saberlo todo como una enciclopedia en fascículos coleccionables,... ni que el sello en Grañón es un beso,... ni donde está la oficina del peregrino de Santiago.
Si se presenta otra ocasión quiero llevarme una inesperada sorpresa con una dura subida después de Cizur bajo la sombra de molinos eólicos zumbadores,... descubrir que Eunate no es un pueblo,... o entrar en un garito de Hontanas donde hay un curioso personaje con parecido a Sancho Panza que se echa vino del porrón a la frente después de ponerte un bocata de jamón,... quiero sorprenderme, asustarme, sentir, gozar y vivirlo como si fuera la primera vez,.... como un auténtico e inocente peregrino novato.
.... Eso sí, la mochila de 45 litros exactos,... y el autobús a Roncesvalles a la hora de siempre.