Octubre, 7:45 a.m., tres grados de temperatura, esperando ansioso el amanecer para ponerme en marcha. Me ajusto las botas por tercera vez mientras canturreo " embor beretik sortuko dira besteak..." de Mikel Laboa,... viene un día claro, despejado y hay pase de paloma.
No se ve un alma. Huele a otoño pirenaico, a hoja seca y caduca, a verde frescura, a hierba fina y limpia, a aire puro aliñado con aroma de leña de haya, a humedad de bosque acompañada de reminiscencias vacunas, a piedra con musgo, a los tiempos de Roldan, a montaña, a feliz infancia, huele un poco afrancesado, a Pirineo con mayúsculas, a comienzo del Camino de Santiago, a peregrino nuevo ya viejo, a erreka que desciende al valle,... a otoño con todas sus partículas como en ningún otra parte del mundo puede oler, huele sencillamente a .... Roncesvalles.
... Y también huele a otra cosa..., pero a que..
No puedo esperar y me lanzo por el arcén de la carretera, enseguida me introduzco por la pista y me envuelve la oscuridad, el camino me guía y comienzo a ladear la cabeza buscándolas,... buscando la primera. Ahí adelante,... una amarilla enorme en la mitad del camino, pero esa no es.
Conforme va aclarando me doy cuenta de que hay un montón,... millares. Me meto a la derecha, es un bosque de retoños de haya jóvenes. Ahí está lo que buscaba, en la mitad, me agacho para comprobar su estado y por el rabillo del ojo veo otro, se encuentra unos metros mas arriba, entre una familia de acebos, arbustos de boj y un grupo de hayas. Me acerco y.... otro! este me envía a un callejón sin salida, entre zarzas, hayas finas cuyas ramas forman una tela de araña gigante a la que yo me entrego como una mosca torponcia. Tengo que desplazarme semi agachado para salir y cuando lo voy a conseguir, dos,... mellizos me obligan a volver a meterme en el mismo cogollo de espesas picas nudosas ribeteadas de hojas ocres, escalar entre tocones musgosos, helechales y estirar el brazo mientras me arrodillo para acceder al risco.
Los sigo y los voy recogiendo todos,... ahora estoy en una especie de joroba verdosa repleta de arbustos, una loma coronada de árboles centenarios y en frente tengo una madriguera de zorro, he atravesado un riachuelo, me he tenido que tirar en plancha por la cama infinita de hojas que es el otoñal bosque, he escalado, me he contorsionado, he ejercido de malabarista y me he caído de culo,... unas tres veces,... mis piernas se han repleto de rayas rojas, son arañazos, no hay rastro de camino, estoy medio perdido,... pero no me dejan volver...
... Encima de mi cabeza hay uno rechoncho de cabeza enana enseñándome la panza, a su derecha el cabezón de la familia, con una boina tamaño XL,... un guaperas con sombrero marrón oscuro y lunar blanco bien proporcionado, me dice hola,... a su lado idéntico, su hermanito, al que los limacos le han comido un poco el rabito. Me desplazo por la escarpada y resbaladiza ladera y me tropiezo con la casa de papa pitufo, llamo a la puerta y como no esta, al saco con ella. El siguiente me sirve de boina, es todo una txapela de Tolosa, un txapeldun de los txapeldunes, me ha obligado a ejercer de rebeco ibérico y cabra montesa a la vez, pero en compensación me presenta unos pocos palmos a su derecha a don "Testablanca" de los bosques plantado en su reino musgo, entre los dos alcanzan un kilo... Casi no veo al rey de los tímidos, mimetizado en la despistante hojarasca.
... En fin, lo que decía,... que Roncesvalles huele a hongos.