La Plata es increíble, auténtica,..... diferente,... y en ella he visto un montón de animales: ciervos.... y liebres,... y conejos,... y ardillas,.... y avutardas,... aves, varios tipos de ave,... En una ocasión Paco se fijó en un pájaro raro que nos salió volando a lo perdiz patosa a pie de camino y cuando me preguntó que sería, le respondí.
-Joder, Paco, no me jodas, no ves que es un alimoche, de toda la vida, chavalín.
La verdad es que no tenía ni zorra idea de lo que era, pero el Paco se lo tragó y yo parecía todo un expertillo en pájaros, como aficionado a la ornitología o así,.... oye, queda bien, que no?. Luego aproveché y rematé la jugada comentándole que en la marisma de Bedua había archibebes patirrojos y chorlitos cipotejos,... y ahí si que ya fui insuperable.
... y sigo con los animales, toros,....toros a patadas,... murciélagos también, al anochecer echaba la visera al aire y se lanzaban como locos en Aljucen, como no ven y funcionan con radar, es un truco para cazarlos, pues creen que es alimento, algún moscardón gordo para la merienda,... ah! y un zorro también, no me acuerdo donde, creo que en la pista forestal de "El Berrocal", pero vi un zorro,... un guapo zorro de color rojo,... menguaba ya el día y me dio la impresión de que le importuné la caza, pues cuando mis ojos se cruzaron con los suyos,... me pareció que reflejaban extrañeza y chasco,... algún conejito platero y plateadito debería estarme agradecido... Curioso la cara de zorros que tienen los zorros.
De vez en cuando también te podías cruzar con algún peregrino, que también es un animal, aunque extraño en la Plata.
Pero el animal que mas vivamente recuerdo es un perro,... un perro no,... un mastín.
Salió lentamente a mi encuentro delante de un rebaño de ovejas sin ladrarme ni mostrarse ofensivo. Era precioso,... de color blanco casi, gran envergadura, con mucho porte,.... y también era viejo, muy viejo, mas de doce años le calculé y esos son muchos para un can,... se le notaba veteranía en su mirada de mastín sabio y seguridad en lo que tenía que hacer: su trabajo bien hecho pero sin avasallar ni excederse mas de lo necesario.
Me anduvo rondando, atento a mis movimientos, sin quitarme el ojo de encima hasta que constató que no era peligroso para sus ovejas,... portador de una nobleza innata, siempre se comportó sin asustarme ni hacerme pasar mal rato,... nada que ver con el típico perro-patada que te sale cuando menos te lo esperas, de mala manera y mezquinamente por detrás ladrándote a la oreja.
Seguí mi camino y se quedó inmóvil con la cabeza bien erguida observando como me alejaba, mientras yo no dejaba de mirar hacia atrás admirando la silueta y la mirada digna con un deje triste de aquél viejo mastín platero. No sé porque y es estúpido, pero le saludé alzando la mano y le deseé suerte.
Y es que a mi los que mas me gustan son los perros que no ladran,... como los husky siberianos,... por eso este relato se lo dedico a una perra llamada Boira,... Boira, Niebla en castellano,... Niebla... ¿el del abuelito de Heidi no se llamaba así?.